Que no te confundan sus cientos de nombres aperitivo, copa de bienvenida, coctel, copa de espera, brindis etc etc etc, ya que todos se refieren a la misma idea, el tiempo trascurrido entre la ceremonia y antes de pasar a mesa para la degustación del menú, su duración correcta suele ser entre 40 minutos y 1 hora, ya que más tiempo nos acaba cansando y menos no podríamos degustarlo todo y saludar a los invitados.
No es un paso obligatorio pero hoy en día nos cuesta creer que después de la ceremonia ya sea civil o religiosa no haya coctel de bienvenida y se entre directamente a comer el menú, suena raro es como si a la boda le faltara alma. Hace unos años era así nos saltábamos este paso tan importante, tanto que hoy en día es imprescindible en todo evento.
El coctel de bienvenida es el momento perfecto para poder saludar a todos tus invitados echarte fotos con ellos y así poder tener un mínimo de tranquilidad mientras degustáis el menú, además que los asistentes pasan un rato muy agradable. Lo tienes que aprovechar para innovar y sorprender a los presentes. No debes pasar ningún detalle pues después de la ceremonia, todos querrán saludarse y empezar a degustar la amplia variedad de canapés y pequeñas delicias que has elegido.
En Restaurante Boabdil, cuidamos todos los detalles para hacer que cada bocado sea irresistible a la vista y al paladar. Como nos encantan estos mini bocados siempre os ofrecemos una gran variedad de canapés combinando colores vivos, con diferentes texturas, y sabores, la elaboración es 100% artesanal. Si hay algo desastroso en una boda es que la copa de bienvenida tenga poca variedad y cantidad, donde para pescar una triste concreta te tienes que abalanzar sobre otros invitados como si esto fuera un partido de rugby o peor aún que solo hay fritanga ultracongelada o que no haya donde sentarse otro gran error, la disposición de mesas altas, bajas, taburetes, sillones favorece la relación entre nuestros invitados y su comodidad.
Cuál es la clave del éxito???? En una copa de bienvenida empezamos por los imprescindibles bajo ningún concepto pueden faltar, aunque sea una boda vegana, EL JAMÓN Y EL QUESO. Por su puesto el jamón debe de incluir su cortador, nada de tenerlo cortado un rato antes, en Restaurante Boabdil todas las copas de bienvenida llevan incluido su cortador de jamón y en el caso de superar un determinado número de invitados se podrán varios ya que lógicamente uno no dará abasto. Con el queso, no puede faltar una gran mesa de quesos nacionales e internacionales acompañados de compotas, frutos secos, frutos de temporada, con una gran variedad de panes con semillas, tomate, aceitunas, nueces y pasas etc etc. Con esto ya nos hemos ganado a más de la mitad de nuestros invitados las fotos que podéis contemplar dan fe de ello.
En cuanto a los canapés ya sean fríos o calientes no hay reglas, nos encantan los tradicionales, mezclándolos con tistes contemporáneos como pulpo a la gallega, mousse de guacamole, ceviche de corvina, sin olviadar las croquetas de varias clases desde las clásicas de jamón a boletus y trufa, siempre siempre siempre caseras.
No pueden faltar los rincones de bebidas, el que más éxito tiene es el de cerveza con una gran variedad nacionales y extranjeras.
Cuanta más variedad haya entre tus elecciones, mayor será la posibilidad de acertar con el gusto de tus invitados.